Al escuchar la música, déjate llevar por el ritmo y mueve tu cuerpo, como te sientas y quieras.
Crea movimientos de acuerdo a lo que dice la letra de la canción o lo que la
música sugiere. No es necesario que lo hagas perfecto, si no que disfrutes de
la música, de la letra, la historia, el movimiento que vayas sintiendo.
Concéntrate en la música y utiliza tu imaginación, tus sentidos:
de la vista, el oído, no importa si lo haces bien o mal, disfruta de la música
y de tus movimientos.
¿Qué hacemos?
Observa los siguientes videos, pide a un adulto papá, mamá o a
quien esté contigo, que te acompañe a verlos.
Ahora es tiempo de charlar en familia sobre los videos y comenten las siguientes preguntas:
1. ¿Te divertiste con los videos?
2. ¿Qué sentiste al moverte con la música?
3. ¿Crees que el movimiento beneficia a tu cuerpo? A ver, a
ver... ¿Por qué?
4. ¿Qué sientes cuando escuchas tu canción favorita?
5. Te invito a elegir una pieza musical que te guste, Tú inventa los
movimientos y pasos y....
¡ A bailar en familia!